En virtud de las disposiciones de la carta política en defensa y prevalencia de los derechos de los niñas, niños y adolescentes manifestamos que, en el marco de la Alianza Nacional contra la Violencia hacia Niños, Niñas y Adolescentes sumaremos esfuerzos para lograr que desde todas las instancias territoriales se actúe de forma coordinada y oportuna para la prevención y atención de las situaciones de riesgo y afectación de los derechos sexuales y reproductivos de niños, niñas y adolescentes.
Lo anterior en el marco de la implementación de la directiva expedida por el Ministerio de Educación así como el desarrollo normativo logrado y los programas ejecutados desde la Consejería Presidencial para la Niñez y Adolescencia, el ICBF, la Fiscalía General de la Nación y Policía de Infancia y Adolescencia, en donde se han socializado las herramientas con las que cuentan las entidades territoriales para abordar esta problemática principalmente desde el ámbito de la prevención, trabajo pedagógico y sensibilización; para que asl se hagan efectivos los mecanismos de denuncia, protocolos de protección e investigación y sanción definidos en la ruta de atención integral.
Queremos reiterar la importancia de avanzar en acciones articuladas e intersectoriales dirigidas a la prevención y atención oportuna y pertinente de situaciones que generen riesgo de vulneración de los derechos de los estudiantes, principalmente los relacionados con violencias de tipo sexual o basadas en género. Sabemos que esto requiere de un proceso continuo de formación para el desarrollo integral del niños, niñas y adolescentes, de un plan de acción que incluya las estrategias pedagógicas para fortalecer competencias ciudadanas y socioemocionales, la educación para la sexualidad y el fortalecimiento de los procesos de participación y de las acciones de cuidado y protección con las familias.
En este sentido, los Comités Territoriales de Convivencia Escolar deben posicionarse como una instancia clave de encuentro y de trabajo interinstitucional y de esta manera garantizar las acciones que sean necesarias para hacer efectiva la ruta de atención integral para la convivencia escolar en cada jurisdicción, haciendo un seguimiento periódico a los hechos que han sido reportados y coordinado con los entes de investigación y los distintos organismos que propendan por la protección de la niñez, en la del esclarecimiento de los hechos y la sanción efectiva de los responsables.
Es por esto que, en el marco de esta alianza, también vamos a adelantar un Conversatorio en el que logremos que las entidades territoriales, los órganos de control y el Gobierno Nacional trabajen de forma articulada sumando todos los esfuerzos para combatir todas las formas de violencia contra niños, niñas, adolescentes y jóvenes.
Cuenta el país con nuestro compromiso, y tenemos juntos que lograr una movilización asertiva de acciones, generación de cultura ole la protección y activación de procesos que permitan que los entornos donde se desarrollan los niños, niñas y adolescentes sean entornos protectores y promotores de su desarrollo integral.